Ha de ser algo más que el puro goce estético lo que impulsa a alguien a pararse frente al mar, a parapetarse y tomar un artefacto entre las manos para detener el impulso de las olas. Ha de ser algo más que la necesidad de hacer lo que otros hicieron antes, algo más que la ilusión de que otro, de que nadie, lo hará después. No puede ser solo el eco de unas palabras leídas, el romántico prestigio del “mar incendiado”.
Del mismo modo habrá, aquí o al otro lado del mundo, quien se pregunte qué impulsa al mar a no quedarse en la orilla, a remontar los parapetos, a tomar el fuego en sus manos, a separar en antes y después. Y no querrá conformarse con la primera respuesta.
Tal vez aquella silueta, que podría ser la de cualquiera, no busca al detenerse la armonía, sino sorprender la falla, el accidente que rompe la pauta de las olas. Si lo logra se irá satisfecho, no aguardará el tiempo suficiente para comprobar que un accidente es solo el pico de otra onda cuya longitud compite con la de nuestras esperanzas.
17 comentarios:
Unos tonos calidos con una luz magnifica. Saludos.
¡Des-lum-bra-do!
(Por las fotos y por el texto)
nunca he visto unas olas tan idénticas!!!
y el color es impresionante!
gracias
Sutileza de imágenes y palabras...una maravillosa conjunción!
Saludos
Me voy sin querer a la fuerza del mar en otros lares.
La luz es pictórica.
El alma individual es al alma universal lo que la ola es al oceáno.
El hecho simple y directo de la sensación de lo Eterno.
Un abrazo, Eduardo.
Verano en el invierno, ojalá todo lo que llegara del mar es estos días fuesen esas sensaciones estivales...
Muy bien conseguidas. Yo estuve haciendo unas muy similares hace poco.
Son dos excelentes tomas, llenas de intensidad, La primera, con su formato cuadrado y el recorte de la silueta humana, es fantástica.
Un abrazo
Pardiez! Qué maravilla!
Buenos dorados y logrado comentario
Preciosas fotos, que me enfrentan por otra parte, a la realidad que estamos viendo, oyendo y leyendo.
Agradecerte estos momentos para distanciarnos de la realidad
Sí que lo hay: el misterio. Como en tus fotos.
no principio do mundo era assim, o fogo não se distinguia da água, nem da terra nem do ar, e o mar era era qual quer coisa ainda por inventar.
como nas fotos.
abrazo
Alucinante, espectacular.
Me asombras siempre.
Qué bonitas tonalidades!!
inquietante momento, la mar embravecida, las olas ardiendo, la mar teñida de sangre y fuego, como en la de Trafalgar.
enhorabuena!!!!
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